Las yo

Por algunas horas creo que ella me roba el alma. A veces la odio, sobre todo en las mañanas, otras veces la amo al recordar las cosas que hago, en este momento pienso en ella y me río, cuando ella en esos momentos piensa en mí medita, se calma un poco, me piensa con pijama en la cama, almorzando con carita de sueño, riendo acostada, se fuma un cigarro y piensa en esto, es su momento de claridad en el estado. Cuando yo pienso en ella me dan ganas de no levantarme, de hacerme una agüita de hierba y quedarme en casa escribiendo esperando que llegue alguien con algo dulce o con cigarros. Pero cuando amanezco riéndome sola y pienso en ella, cuando amanezco con ganas de gritar (6 días a la semana), me visto y salgo para buscar a alguien y reírme acompañada. Ella es mi impostora quiere adueñarse de mí todos los días, o quizás yo soy su impostora que la quiere cambiar, pero en realidad esto es imposible, miramos con los mismos ojos, tenemos la misma cama, la misma madre, la misma enredada vida, besamos con los mismos labios, somos un ser, somos la misma persona, no creo que esto sea bipolaridad ni ninguno de esos casos enfermizos. Debí obedecer y solucionar esto antes, pero me gusta, me entretiene y se va cuando yo deseo (supongo). Aparte ahora es mas normal, antes éramos tres, pero a la tercera ya la desechamos por que creíamos que nos engañaba y no seguía nuestro ritmo de vida